Hoy te llevamos por ultima vez al Colegio, fue el ultimo día que te pusiste tu uniforme... no puedo evitar pensar en ese primer día que te llevaba de la mano, no sabia donde ponerte el pin y lo hice bien hasta que vi como lo llevaban al cuello las demás niñas. Entonces empezaron los días de magia... los bailes, las presentaciones, los Vía Matris, días deportivos, los Corpus y tantas fiestas... eran días de piñatas, de dientes debajo de la almohada... de mil preguntas. Sola te abriste campo en el Colegio, hiciste amigas y te integraste perfectamente a ese mundo nuevo para vos... después fue el paso al Colegio de las grandes y los cambios que esto traía, ya no estabas en el mundo fantástico de parvularia, sin embargo lo disfrutaste igual... y dejamos de acompañarte a los cumpleaños porque ya no eran piñatas, empezaron las Primeras Comuniones y las salidas a almorzar de vez en cuando... y el tiempo, ese que hoy veo como un ladrón, no detuvo su marcha... llegaron las fiestas de quince años y los almuerzos con los amigos se convirtieron en cenas y salidas al cine. No se donde se me fue cada día, deberia recordar cada vez que te bajaste del carro y me dijiste "Adios mami"... y aunque me encanta verte crecer y ver la persona en que te has convertido, no puedo evitar que la nostalgia me haga nudo la garganta y me llene los ojos de lagrimas...
Te espera un futuro hermoso, no exento de problemas, tristezas o dificultades pero si lleno de alegrías, ilusiones, esperanzas, metas y promesas... pero sobre todo de lo que vos querras hacer de el todos los días!
Dale Princesa, camina hacia la vida... contas con las mejores armas que una persona pueda tener: tu Fe y el amor de tu familia.
Que el Señor te proteja todos los días! Te amo!
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